La Habana, Neptuno y el foco de la infección insana.

[Tito Maciá]

Lo que leemos en la prensa, escuchamos por la radio, vemos por la televisión o está escrito en los libros de historia siempre estará tamizado por las creencias religiosas, por las no creencias, o por afinidad política de quien trasmite la información, eso siempre se nota, no vale la pena decir nada más sobre ello.

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Lo que escribe el astrólogo también.  Si es un astrólogo ateo siempre dirá la cosas de un modo distinto a los astrólogos que creemos en Dios.  Un astrólogo de izquierdas expresará la realidad astrológica con un tono en que se notará su tendencia de pensamiento ideológico de izquierdas, y por supuesto a un astrólogo liberal, no adherido a ideología alguna, también se le notará, y además recibirá insultos y descalificaciones de los que piensan que si no eres de izquierda directamente eres fascista o cualquier apelativo insultante y descalificador.

Y con esos mimbres tenemos que fabricar nuestras canastas.

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Hoy a voy a meterle mano a un tema muy sensible, una zona enferma del cuerpo de la humanidad, que tan solo rozarla provoca dolor en muchas personas.

El mundo es un ser multidiverso, por decirlo de alguna manera, y los seres humanos en su conjunto somos una plaga, a qué negarlo a estas alturas.

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Astrólogicamente hablando las plagas, osea las enfermedades como la peste, una enfermedad infectocontagiosa que afecta tanto a animales como a humanos, están relacionadas con la influencia del planeta Neptuno. Prueba de ello fueron los años de peste negra, peste bubónica o muerte negra que fue una pandemia que se llevó por delante a 100.000.000 de personas a mediados del siglo XIV coincidiendo con una configuración astrológica donde se le vio el “pelaje” a Neptuno y su relación con las enfermedades infecciosas y contagiosas.

En el ciclo de Júpiter y Saturno, el ciclo más importante que refleja lo que le ocurre a los seres humanos, en la conjunción ocurrida el 2 de junio de 1325, y cuya influencia se prolongo 20 años, hasta 1345, calculado para cualquier lugar de Europa, la conjunción de Júpiter y Saturno, que dan vida al ciclo, se encontraba en la Casa VIII, el escenario de las muertes, junto al Sol, y sobre todo formando una oposición con Neptuno, el planeta de las enfermedades infecciosas y contagiosas.

Durante el tiempo del ciclo murió más de un 20% de la población mundial a causa de una enfermedad infecto contagiosa.

Podría mostrar un amplio abanico de ejemplos sobre la relación entre Neptuno y las enfermedades, podría hacer una tesis doctoral sobre ello, pero nadie se ocuparía de valorarla con fines académicos. A esos "osos" cavernarios de la universidades les da sarpullido solo de oír hablar de astrología, así que no vale la pena que use mi tiempo presentando más ejemplos. Como ejemplo un botón.

Las enfermedades contagiosas, desde la óptica astrológica pueden ser del cuerpo, o del espíritu o mentales, como muy bien expone Ben Ragel en el Libro V.  Las enfermedades pueden ser individuales o en el caso de las de Neptuno, contagiosas y por ello colectivas, en eso se nota que son enfermedades de Neptuno.

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Las enfermedades contagiosas y sus plagas las estudian los médicos, las enfermedades mentales los psiquiatras y la enfermedades sociales contagiosas las estudiamos los sociólogos y los astrólogos, siempre fue así.

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Buena parte de América del sur está, socialmente hablando, enferma. Una persona está enferma mentalmente cuando se nota que no es feliz, se siente desgraciado y encima contagia con su infelicidad y su desgracia a los demás, eso es una de las cosas que aprendí cuando estudiaba para psiquiatra. A los que no estén en esas condiciones no se les considera enfermos metales, pueden tener "alteraciones" en su salud mental.

Los países mentalmente enfermos se detectan con facilidad porque rápidamente se observa una extensa pobreza, una infelicidad y un sentimiento de desgracia que tratan de expandir como se expande una enfermedad contagiosa.

Si solo son pobres e infelices y no tratan de que los demás sigan por su camino, es decir, no hacen proselitismo político de su estado, no "contagian", entonces no son enfermos de verdad, eso se arregla con “vitaminas” en formato dólares. Lo malo es cuando se padece una enfermedad mental social, se hace desagraciado e infeliz a un pueblo y se trata de expandir y contagiar de la misma  enfermedad a otros países. Esas enfermedades suelen presentarse en dos formatos sociales muy conocidos; en formato religiones o en modo comunismo. Alguien tenía de que decirlo.

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El foco de enfermedad social que se ha agudizado en estos primeros 20 años del siglo XXI está, astrológicamente, perfectamente identificado. Para observarlo, los astrólogos disponemos de las herramientas adecuadas, y para observar las alteraciones de salud social que afectan a grupos de millones de personas, usamos la carta del cielo del ciclo de Júpiter y Saturno, el mismo ciclo que he usado para observar la peste negra.

En la carta del cielo del ciclo de Júpiter y Saturno de 2000-2020, el último katún de Tierra, el planeta Neptuno es angular, se localiza justo en el Bajo cielo de la Habana, la capital de Cuba, señalando de este modo el foco de la enfermedad contagiosa que se extiende de esa parte del mundo.

Desde ese lugar del mundo se ha ido extendiendo una ideología obsoleta y fracasada, como una enfermedad infecciosa y contagiosas que cuando contamina un lugar lo enferma, acaba con la injusta desigualdad excesiva y deja al país en una igualitaria y desgraciada igualdad en la pobreza, salvo la de los agentes transmisores de la enfermedad que son los dirigentes comunistas que han tomado el poder previamente.

La acción de esta enfermedad social que se le puede llamar comunismo, por ponerle un nombre, pero no tiene nada ver con los ideales comunistas originales, se extiende con mayor facilidad en los países democráticos que padecen una excesiva desigualdad social y tienen una clase media menguada.  

Donde la clase media es superior a la de la pobreza, esta enfermedad no puede de medrar.

En la actualidad, ya terminando el ciclo de 20 años, se ha extendido la “peste cubana” por un buen número de países, dejando agotados a países como Nicaragua o gravemente enfermos a países como Venezuela.

Esa enfermedad social no se ciñe al área latino americana, aquí enfrente de España tenemos un país igualmente enfermo que ha obligado a la mayoría de sus jóvenes a emigran a miles a países europeos huyendo de las bondades del patológico sistema político que los tiene enfermos. A nadie se le ocurre decir ni “mu” de Argelia porque de ese país enfermo de Neptuno, Europa de se nutre del gas que necesita para darse una buena calidad de vida.

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Y esta es otra forma de ver la realidad, una opinión desde el mundo libre donde tenemos libertad de expresión.  Otra cosa es que haya gente maleducada que carente de argumentos para debatir, me coloquen la cruz gamada que llevan en sus corazones. Resistiré.

 

 

 

 

 

 

 

[Sergio Daniel]

Anarco Capitalista

Autonomia Plena

VA de la maoo con el ciclo que se nos viene encima...